Peregrinacin por el papa Francisco, un blsamo contra Trump

El hasta ahora imparable aspirante a la nominacin presidencial republicana, Donald Trump , tilda a todo el que lo contradiga de "estpido" y se jacta de que las barbaridades que cacarea son las cosas que muchos quieren decir y no se atreven.

Su arrogancia y su retrica anti todo lo han convertido en dolo de ese 30 por ciento del Partido Republicano que aspira a que Trump, como quien construye y destruye rascacielos, sea capaz de borrar por arte de magia los cambios demogrficos que han alterado el rostro fsico y electoral de Estados Unidos.

Y, tambin hasta ahora, el miedo y la tibieza con los cuales el Partido Republicano y los otros precandidatos republicanos han enfrentado a Trump, con la excepcin de los cuestionamientos a medias de Jeb Bush y Lindsey Graham, slo han enaltecido al empresario que ha alterado pronsticos y estrategias en los dos partidos polticos.

Trump ha insultado a los mexicanos, a los inmigrantes, a quienes hablamos espaol, a las mujeres, los veteranos, a periodistas hispanos como Jorge Ramos y Jos Daz-Balart, y a todo el que considere inferior a su "grandeza". Su retrica ha envalentonado a ciertos sectores prejuiciosos de nuestra sociedad y su retrica incendiaria ha tenido y tiene el potencial de incitar a la violencia.

Todo este noveln se desarrolla en el contexto de la ya prxima visita del papa Francisco a Estados Unidos, un papa que representa todo lo que Trump no es: humilde y compasivo.

Los inmigrantes, quienes los apoyan y los escasos polticos que se han atrevido a enfrentar al bocazas de Trump, ven en esta visita del Papa Francisco a Washington, D.C., Nueva York y Philadelphia la posibilidad de que una autoridad eclesistica le salga al paso a Trump, as sea indirectamente, con lecciones de humanidad y compasin, independientemente de la religin que profese Trump, que est abierta a debate, aunque l asegura ser presbiteriano.

Muchos de quienes lo siguen son tambin de esos cristianos que hacen honor al refrn de "a Dios rogando y con el mazo dando". Se cantan muy religiosos, pero pisotean las enseanzas bblicas a cada oportunidad.

El 15 de septiembre, desde el centro de detencin York, en Pennsylvania, ms de 150 mujeres, inmigrantes y activistas de diversas organizaciones y campaas locales, estatales y nacionales, iniciarn la Peregrinacin 100 mujeres, 100 millas que culminar el 22 de septiembre en la Baslica Nacional de la Inmaculada Concepcin en Washington, D.C.

Ese mismo da realizarn una vigilia y procesin desde la Baslica al Reflecting Pool del Capitolio; y el 23 de septiembre habr una peregrinacin al Elipse durante la recepcin de bienvenida al papa Francisco en la Casa Blanca. Entre las organizaciones y campaas participantes figuran We Belong Together, Not1More, CASA de Maryland, SEIU, AFL-CIO, PICO y la Coalicin de DC de Derechos de los Inmigrantes.

Una de las peregrinas es Juana Flores, subdirectora de la organizacin Mujeres Unidas y Activas de San Francisco, grupo que asiste a trabajadoras domsticas y vctimas de violencia domstica. Juana fue monja en Mxico y en 1979 estuvo a cargo de preparar las comidas para el papa Juan Pablo II durante su visita a Oaxaca, Mxico.

Con el paso del tiempo Juana abandon el convento y luego se aventur a cruzar sin documentos a Estados Unidos con sus hijos. Ac se cas, se regulariz y es ciudadana. Pero vivi momentos amargos como lo viven ahora muchos inmigrantes que esperan una solucin permanente a su limbo migratorio.

En la visita del papa Francisco y con la peregrinacin Juana ve esperanza.

"El papa Francisco y el seor Donald Trump son dos lneas paralelas muy diferentes. Esperamos que los mensajes de humildad, de paz y de compasin que el papa predica y vive, alivien un poco el dolor que estamos sintiendo por todo lo que el seor Trump est diciendo", indic Juana.

"Nos ha humillado profundamente a todos los inmigrantes latinos y esperamos que el papa contrarreste ese dolor que sentimos. Tengo la esperanza de que el papa, como el pastor de la iglesia suprema, nos alivie el dolor spiritual, pero que al mismo tiempo presione polticamente y le indique a este seor (Trump) que lo que est diciendo es errneo y que empuje la reforma migratoria que estamos esperando", agreg Juana.

Guillermina Castellanos, fundadora de La Colectiva de Mujeres, agrupacin de empleadas domsticas de San Francisco, es otra de las peregrinas.

"Tenemos mucha fe en la visita del papa Francisco. l est poniendo mucha atencin en el tema de la inmigracin y sobre todo en el discurso antiinmigrante de Donald Trump, que es altamente racista. Estoy segura de que va a abogar por todas las mujeres que participaremos en la peregrinacin y nuestras familias. l ha impulsado y promovido muchos cambios en tan poco tiempo, ha modificado la perspectiva de ver las cosas desde el punto de vista de la humildad y la caridad. Y como mxima autoridad cambiar tambin la forma de pensar de quienes ahora son antiinmigrantes, porque va a tocar sus corazones como lo ha hecho con cada uno de nosotros", dijo Guillermina.

Ser la visita del papa Francisco un blsamo contra la retrica antiinmigrante e hiriente de Trump? Muchos esperan que as sea.

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